El vicefiscal general considera su renuncia y se reunirá con Trump este jueves
El vicefiscal general, Rod Rosenstein, está considerando presentar la renuncia a su cargo en medio de versiones de que incluso sería despedido por el presidente Trump. La Casa Blanca a través de su portavoz, Sarah Sanders, indicó que el alto funcionario del Departamento de Justicia se reunirá con el mandatario este jueves.
“A solicitud del vicefiscal general Rod Rosenstein, él y el presidente Donald Trump tuvieron una extensa conversación para discutir las recientes noticias. Debido a que el presidente está en la Asamblea General de Naciones Unidas y tiene una agenda llena con líderes de todo el mundo, ellos se reunirán el jueves cuando el presidente regrese a Washington DC”, indicó la secretaria de prensa en un comunicado.
El primer medio que reportó sobre el caso fue Axios, que indicaba que Roseisntein había presentado su renuncia al jefe de gabinete John Kelly ante la eventualidad de ser despedido, mientras que otros indicaban que el funcionario iba a la residencia presidencial para ser despedido por el presidente.
En medio del cruce de versiones sobre la suerte del segundo de Jeff Sessions, se informó que Roseistein se dirigiría a la Casa Blanca para hablar sobre su situación, aunque no está claro si era para presentar su renuncia o para ser informado de su despido.
Rosenstein quedó en el ojo de un huracán político luego de que la semana pasada The New York Times publicara una artículo en el que se aseguraba que el segundo de Departamento de Justicia había sugerido grabar al presidente Donald Trump e incluso invocar la Enmienda 25 de la Constitución que contempla la remoción del presidente si dos tercios de su gabinetee consideran que está incapacitado de gobernar.
El vicefiscal, quien ha sido ampliamente criticado por Trump y que es el responsable de vigilar a la fiscalía especial de la investigación independiente sobre la supuesta coordinación entre rusos y la campaña presidencial de Trump, el llamado 'Rusiagate', propuso en 2017 grabar en secreto al mandatario en la Casa Blanca y sugirió convencer a del gobierno activar la Enmienda 25, que abre un proceso para cambiar de presidente, en este caso por su supuesta incapacidad mental.
En un comunicado, el viernes pasado, el vicefiscal negó que esos eventos hubieran ocurrido de la manera descrita en el artículo, al tiempo que otras fuentes indicaban que habían sido expresiones "sarcásticas" de su parte sobre las cuales nunca tomó acción.
"Han visto lo que sucedió en el FBI y el Departamento de Justicia. Los malos, se han ido todos. Todos se han ido. Pero hay un hedor persistente y nos vamos a deshacer de eso también", dijo el mandatario ante sus seguidores.
Trump arremetió contra aquellos que dentro del Departamento de Justicia actúan, a su parecer, con un prejuicio hacia su persona, y se vanaglorió de los despidos que ha llevado a cabo entre su plantilla en los últimos meses, especialmente dirigidos a aquellos involucrados en la investigación del 'Rusiagate', que trata de establecer si hubo coordinación entre la campaña de Trump y Moscú.
La salida de Rosenstein del Departamento de Justicia probablemente genere más combustible a las críticas hacia Casa Blanca por la forma en que ha manejado la investigación especial contra la campaña presidencial de Trump a pocas semanas de las elecciones de mitad de periodo.
Esto se debe a que Rosenstein ha sido un duro defensor del trabajo del fiscal especial Robert Mueller y se ha negado a las sugerencias de despedirlo negando que se trate de una conspiración del Partido Demócrata para acabar con la presidencia de Trump.
Ahora la incógnita está en el hecho de si el presidente con un nuevo vicefiscal en el cargo querrá intentar nuevamente desmantelar el 'Rusiagate'.