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Termina toma de rehenes en un supermercado en el sur de Francia: al menos cuatro muertos, incluido el atacante

Un sujeto entró disparando en el local ubicado en Trebes gritando que pertenecía al grupo extremista Estado Islámico. Allí mató a dos personas e hirió gravemente a otras tres. Previamente había atacado a las personas dentro del auto que usó para movilizarse, matando a uno de ellos.
23 Mar 2018 – 07:46 AM EDT
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Un hombre armado que mantuvo como rehenes a varias personas en un supermercado en la localidad de Trebes, en el sur de Francia, fue abatido por la policía dejando un saldo de al menos cuatro personas muertas, incluido el atacante.

El atacante, Redouane Lakdim, de 26 años y de Carcassome, muy cerca de donde ocurrió el incidente, era conocido por la policía local por delitos menores y venta de drogas y había estado bajo la lupa de las autoridades por su potencial radicalización.

Las autoridades hablan también de tres heridos de gravedad tras el que es cosiderado el primer ataque terrorista desde que el presidente Emmanuel Macronlevantó el estado de emergencia el año pasado.

El grupo Estado Islámico se atribuyó el ataque sin proveer evidencia alguna.

En todo caso las preguntas que se hacen lo medios locales en este momento es cómo Lakdim, de origen marroquí, obtuvo el arma y protagonizó el ataque a pesar de que era monitoreado.

El ministro del Interior, Gerad Collomb, dijo que lo habían estado vigilando y creían que no se había radicalizado. "ya estaba bajo vigilancia cuando repentinamente decidió actuar".

Justo después de las 10:00 am, hora local, Lakdim portando un arma detuvo un auto en las afueras de Carcassonne, matando al pasajero e hiriendo gravemente a su conductor.

Luego manejó el auto y siguió de cerca a cuatro oficiales de la policía que estaban haciendo ejercicios hasta la sede de ese cuerpo donde abrió fuego de nuevo, heriendo seriamente a uno de ellos, quien sufrió la fractura de costillas y la perforación de un pulmón.

Ataque al supermercado

Lakdim luego manejó varios kilómetros hasta un automercado de la cadena Super U en Trebes. Allí entró disparando, causándole heridas mortales a dos personas, entre ellos el carnicero del local.

Mientras disparaba testigos aseguran que gritaba que era un soldado de Estado Islámico.

La policía intervino rápidammente para evacuar a algunas de las personas que se encontraban dentro del supermercado y fue cuando encontraron al atacante protegiéndose con el cuerpo de una rehén para evitar que le dispararan. Un policía logró que el Lakdim intercambiara a la mujer por él y permaneció allí mientras más personas eran sacadas del lugar.

Cuando escucharon un nuevo disparo, los oficiales de la policía que estaban afuera entraron y mataron al atacante, pero el oficial que decidió quedarse a cambio de la liberación de la mujer resultó gravemente herido.

La toma de rehenes duró unas tres horas durante las cuales el atacante pedía la libberación de presos por delitos de terrorismo. Específicamente pidió por la liberación de Salah Abdeslam, el único sospechoso sobreviviente del grupo yijadista que llevó a cabo los ataques de noviembre de 2015 en París, donde murieron 130 personas.

Cientos de policías han sido desplegados en el área y toda la zona en los alrededores del supermercado de la cadena Super U ha sido acordonada.

"Gran parte de los empleados y clientes del Super U lograron huir", dijo una fuente de los servicios de seguridad ses a la agencia de noticias AFP.

En el supermercado de 2,392 yardas cuadradas (2,000 metros cuadrados) trabajan regulamente 50 empleados, aunque en la sede central de la cadena no disponían de información exacta sobre el número de trabajadores que se encontraba en el lugar a la hora del ataque.

Se estima que fueron movilizados a la zona 80 efectivos de bomberos y médicos en el lugar con dos helicópteros listos para evacuar a posibles heridos. La prefectura de Trebes estableció un centro de crisis y la circulación en toda la ciudad está restringida.

En enero de 2015 una situación similar se produjo en un automercado de París cuando un extremista mató a cuatro personas. A finales de ese año el gobierno declaró un estado de emergencia nacional tras los ataques en la capital en noviembre, el peor incidente de violencia que ha sufrido ese país europeo desde el fin de la Segunda Guerra Mundial.

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