Sí, los atletas como Iker Casillas también sufren de infartos. Te explicamos por qué
El mismísimo Cristiano Ronaldo fue operado del corazón cuando tenía 15 años, según contó su madre en el libro Madre Coraje. La anécdota sale a la luz estos días porque las páginas de los diarios deportivos se han llenado de vocabulario aparentemente contradictorio como "deportista de élite" y "ataque al corazón".
El infarto del guardameta ha provocado gran conmoción en la sociedad, extrañada de que el corazón de un deportista como Casillas tenga una arteria que se pueda obstruir. Casillas, que ha ganado todo lo ganable en el mundo del fútbol (incluido cinco Ligas con el Madrid y una con el Oporto; tres Champions; dos Eurocopas y un Mundial) sufrió un infarto de agudo de miocardio el miércoles, mientras entrenaba, y fue sometido a un cateterismo cardíaco. Los servicios médicos le colocaron un stent, una especie de muelle que expande el vaso sanguíneo obstruido y permite que la circulación fluya normalmente.
Se espera que el deportista reciba el alta del hospital este fin de semana o el lunes, y después deberá seguir un periodo de convalecencia de tres meses. Pasado el susto, el debate es la continuidad de la carrera profesional del portero, que recientemente había renovado con el club portugués por dos temporadas para acabar así su carrera con 40 años.
Aunque el infarto agudo de miocardio es la principal causa de muerte en el mundo, tanto de hombres como de mujeres, no es habitual que un deportista sufra este tipo de dolencia. Las estadísticas contabilizan un caso de este entre 50,000 atletas que practican deporte, de acuerdo con el diario deportivo español AS .
El papel de la genética
Juan Velásquez, cardiólogo de Florida, señala a Univisión Noticias que, como la mayoría de las enfermedades, los problemas cardíacos “ tienen un componente genético y un componente ambiental”. Es decir, son el resultado de una combinación entre anormalidades que están presentes desde nuestro nacimiento con otras situaciones relacionadas con nuestro estilo de vida. “Cuando una persona joven, aparentemente saludable y con un estilo de vida sano desarrolla un problema cardíaco, generalmente la causa es una predisposición genética aumentada a la acumulación de placas obstructivas en las arterias que irrigan el músculo cardíaco, o un problema congénito de la conducción eléctrica en el corazón que puede causar arritmias y muerte súbita”, señala el doctor.
" La gran lección que le debe quedar a la comunidad en general es que ni la juventud ni un estilo de vida saludable garantizan una total protección contra los problemas cardíacos, y que es muy importante visitar un doctor periódicamente para hacer una evaluación completa de riesgo cardiovascular para así poder implementar estrategias preventivas”, opina el cardiólogo.
Parveen Garg, cardiólogo y profesor de medicina clínica en la Escuela de Medicina Keck de la University of Southern California señala por su parte a Univision Noticias que “ algunas personas nacen con condiciones congénitas que solo se manifiestan ante actividad física extrema. Esta anormalidad cardiaca puede estar relacionada con el grosor del músculo del corazón, la posición de las arterias que llegan al corazón, o factores relacionados con la conducción eléctrica del corazón, todo lo cual puede favorecer la arritmia”. Esto quiere decir, opina este experto, que cuando un atleta profesional tiene un defecto congénito que no ha sido detectado previamente, “ el estrés físico extremo podría desembocar en una arritmia potencialmente fatal”.
El futuro de Casillas
Velásquez cree que el futuro deportivo de Casillas “ depende de la presencia o no de otras obstrucciones en las arterias que irrigan el músculo cardíaco y de la función de bomba de su corazón después de este evento”. Si no tiene otras obstrucciones y su función de bomba es normal, señala, “podría seguir compitiendo al mismo nivel, de lo contrario tendría que empezar a considerar retirarse del fútbol profesional”.
Este experto es cauteloso ya que no conoce los detalles del tratamiento, pero advierte que tras la implantación de un stent de metal para liberar la obstrucción debe tomar medicamentos para prevenir la formación de coágulos en dicho dispositivo. “ Estos medicamentos que afectan la coagulación representan un riesgo para una persona que practica profesionalmente un deporte de o”, indica.
En esta línea opina Juan Antonio Corbalán, exjugador de baloncesto del Real Madrid y cardiólogo en la actualidad que cree que Casillas no volverá a jugar al fútbol profesional. "No se puede jugar al fútbol con un stent coronario y mucho menos un portero ", indicó en declaraciones a Televisión Española. "Acabará haciendo una vida absolutamente normal pero, desde mi punto de vista, no jugará en deporte profesional".
El médico del Oporto, Nelson Pulga, señaló a los medios esta semana que va a quedar "perfectamente recuperado", aunque advirtió que habrá que esperar para saber si podrá continuar jugando al fútbol de máximo nivel. “Casillas se está recuperando bien, pero es demasiado pronto para pronunciarnos sobre su futuro. Va a depender de muchos factores, de la medicación que precise, de su evaluación, no solo en situación de reposo, sino con estrés y el ejercicio físico que le exige su carrera, y de la voluntad que él mismo tenga de seguir. Solo después de ponderar esos factores, con mucha calma y diálogo, se decidirá si quiere continuar; pero que va a quedar perfectamente recuperado y restablecido, de eso tenemos prácticamente la certeza”, señaló.
Ni el primero ni el último
Casillas no es el único deportista de élite que tiene este percance. Sami Khedira, centrocampista del Juventus, fue operado en febrero de una arritmia cardíaca y al mes regresó a los entrenamientos. Fabrice Muamba, por su parte, sufrió un ataque el corazón en 2012, cuando tenía 23 años y era un jugador profesional en Reino Unido.
El jugador se desplomó y el retrato de la escena conmocionó al mundo y sirvió para resaltar el invento que le salvó la vida: el desfibrilador portátil. No tuvo esa suerte el futbolista italiano Davide Astori, que falleció por un paro cardiorespiratorio mientras dormía en la habitación de un hotel mientras su equipo, la Fiorentina, estaba concentrado para un partido frente al Udinese.