Cuando el covid-19 todavía sigue causando estragos, Estados Unidos y otros 90 países se enfrentan a una nueva crisis sanitaria: la viruela del mono o viruela símica. Dos años de pandemia dejaron lecciones sin aprender: de nuevo los Gobiernos no tienen vacunas suficientes para atender esta emergencia. "¿Dónde están las vacunas", se preguntan los manifestantes en protestas como la de la imagen en Nueva York. Crédito: Jeenah Moon/Getty Images
La viruela del mono es un misterio fuera de África pero en ese continente la sufren desde 1970. El primer brote externo ocurrió en 2003 en Estados Unidos y se vinculó al o con perritos de las praderas, un roedor. Aunque se llama viruela del mono, el origen de la enfermedad sigue siendo una incógnita. Se cree que son los roedores africanos y los primates, como los monos, los que albergan este virus e infectan a los humanos por o directo con la sangre, fluidos corporales o mucosas del animal. Crédito: CHARLES BOUESSEL/AFP via Getty Images
Al principio de la infección, la viruela del mono se puede confundir con la varicela y el sarampión. Si hay inflamación de los ganglios linfáticos, es viruela símica. La erupción en la piel suele comenzar entre 1-3 días después de que aparezca la fiebre y se concentra sobre todo en la cara y las extremidades. En la imagen, un neoyorquino recuperado muestra cómo tenía la piel durante la enfermedad. Crédito: YUKI IWAMURA/AFP via Getty Images
Los puntos de vacunación que se instalan estos días en las ciudades más afectadas de Estados Unidos no son suficientes. La escasez de dosis contra la viruela del mono se espera que dure meses y por eso se están racionando las inyecciones hasta aplicar solo un quinto del contenido. Sin embargo, esa cantidad no protege bien a las personas con el virus del sida, VIH, o con otras enfermedades que debilitan el sistema inmune, según las primeras investigaciones. Crédito: ROBYN BECK/AFP via Getty Images
A 6 de agosto, había confirmadas nueve muertes por viruela del mono en el mundo: España (2), Nigeria (3), República Centroafricana (2), Ghana (1) e India (1). La enfermedad es en general leve pero sí puede causar cuadros graves. La tasa de letalidad actual es de entre el 3% y el 6%. En las naciones más afectadas se ven escenas que recuerdan a los momentos más duros de la pandemia del covid-19, como este centro de aislamiento para casos de viruela símica en India. Crédito: SAM PANTHAKY/AFP via Getty Images
El cuadro clínico de la viruela símica se asemeja al de la viruela, enfermedad que causó millones de muertes en la historia pero quedó erradicada a nivel global en 1980. Ambas son infecciones por un virus del género Orthopoxvirus pero la símica es menos contagiosa y causa una enfermedad menos grave. Tanto para las vacunas como para el tratamiento de la viruela del mono se están aprovechando los que se desarrollaron para la viruela, una enfermedad que se ve reflejada en esta imagen de una madre infectada con su bebé. Crédito: National Museum of Health and Medicine, Armed Forces Institute of Pathology, Washington, D.C
Los Gobiernos del mundo prometieron que estarían preparados para la siguiente emergencia sanitaria, tras el caos inicial del covid-19, pero no ha ocurrido. Se repiten las protestas de la ciudadanía porque de nuevo no hay vacunas para todos y la respuesta no ha sido lo ágil que esperaban. En México, manifestantes denuncian que el gobierno ha minimizado esta emergencia sanitaria. Crédito: EFE/José Méndez
Como no hay vacunas suficientes, la Organización Mundial de la Salud (OMS) y las agencias de salud nacionales recomiendan que se usen para los colectivos más afectados, como las personas que tienen numerosas parejas sexuales. La gran transmisión de este brote se está dando por la vía sexual, aunque la viruela del mono no es una enfermedad de transmisión sexual. El contagio más probable se produce por o estrecho con un infectado, como el que se tiene en las relaciones íntimas. Se investiga, no obstante, si se contagia también por los fluidos sexuales. Crédito: EFE/EPA/IDREES MOHAMMED
Como ocurrió con la irrupción del covid-19, circulan muchos bulos sobre la enfermedad y su contagio. La comunidad LGTBI protesta en todo el mundo para que no se la estigmatice como ocurrió en los años más duros del sida. Critican que la OMS se dirigiera a los hombres homosexuales, el grupo más afectado por este brote, y no a toda la población en su llamado a disminuir el número de relaciones íntimas. Crédito: AP