‘Boricua’: Siete razones para votar por Hillary Clinton en vez de Donald Trump

En el pasado has escuchado sobre la importancia que tiene el voto latino en esta elección Presidencial del 2016. Hoy, hablaremos de un importante grupo de esta comunidad que continúa en crecimiento: la comunidad puertorriqueña. De acuerdo con el último censo y el Pew Hispanic Center hay alrededor de 3.4 millones de ciudadanos estadounidenses que residen en la isla y sobre cinco millones que residen en distintos estados incluyendo Florida, Nueva York, Nueva Jersey, Connecticut y Pennsylvania, entre otros.
Con estos datos, los puertorriqueños se colocan actualmente como el segundo mayor grupo de origen hispano de la nación, siendo más del 9% de la población hispana total en los 50 estados y el Distrito de Columbia.
Aunque los puertorriqueños son ciudadanos de EEUU no pueden votar en la elección presidencial general desde la isla. No obstante, con tan solo adquirir un boleto de ida hacia cualquier estado de la Unión (Florida, Nueva York, etc.), adquieren automáticamente ese derecho.
Es en ese momento que el voto boricua desde el continente se puede dejar sentir ya que tiene la oportunidad de decidir quiénes tomaran el futuro y las riendas de nuestra nación.
Ante los grandes retos políticos y económicos que atraviesan la isla y la comunidad puertorriqueña en el continente, como boricua es importante que antes de emitir tu voto el próximo 8 de noviembre evalúes qué candidatos presentan los mejores planes y propuestas no solo para atender los grandes retos de esta comunidad sino para devolver un camino de progreso a nuestra gente: ¿Donald Trump o Hillary Clinton? En esta columna he identificado siete ‘issues’ y razones por las cuales todo puertorriqueño en el continente debe concluir que un voto por Hillary Clinton es su mejor opción sobre Donald Trump en esta elección presidencial. Veamos.
Plan/Agenda de Trabajo: El primer paso para responder a la pregunta de cuál de los candidatos posee el mejor plan/agenda de trabajo para los puertorriqueños es ir a la fuente e investigar cuales son dichos planes. En el caso de Donald Trump, él mismo cuenta con su portal de internet, www.donaldjtrump.com y en el caso de la Secretaria Clinton, también tiene su portal, www.hillaryclinton.com. Lamentablemente en el caso de Trump, de una búsqueda en dicho portal de internet no se desprende ni podemos encontrar ninguna propuesta específica, ni un plan para la isla de Puerto Rico o la comunidad puertorriqueña en el continente. Ahora bien, ¿podemos esperar como comunidad algo positivo de un candidato a Presidente que tan siquiera menciona a Puerto Rico o la comunidad puertorriqueña en su plataforma y planes de trabajo? Por otro lado Hillary Clinton ha elaborado un plan detallado que no solo demuestra su conocimiento e historial con la comunidad puertorriqueña sino su compromiso de trabajo para poner a la isla y a los puertorriqueños en un camino de estabilidad y progreso. En la categoría del plan de trabajo, Donald Trump de entrada ya nos falló a los puertorriqueños y por esta razón no merece nuestro voto.
Empleos/Economía: Tanto para los puertorriqueños en la isla como en el continente tener un empleo bien remunerado es sumamente importante. De hecho, una de las razones por las cuales hemos visto una migración histórica de puertorriqueños desde la isla hacia el continente es por la búsqueda de mejores empleos y oportunidades. Mientras Donald Trump promete hacer “grande a Estados Unidos de nuevo” trayendo de vuelta empleos, la realidad es que sus empresas continúan invirtiendo en el extranjero y exportando empleos locales a otros países, contradiciendo así su consigna de campaña. Más preocupante aún es que su plan, de acuerdo con varios expertos no partidistas, le costará a nuestra economía una pérdida de casi cuatro millones de empleos que definitivamente nos afectará a los puertorriqueños tanto en la isla como en el continente. El único historial de Donald Trump con los puertorriqueños en este tema es de nuevo irse a la quiebra dejando a personas sin empleo y a sus acreedores en espera en su principal propiedad en la isla. Hillary Clinton, por su parte, ha presentando un plan especifico y detallado que promete crear alrededor de 10.4 millones de empleos, esto recortando impuestos a la clase media, apoyando el sector innovador de los pequeños y medianos negocios, y sobre todo invirtiendo en la industria de la manufactura que generará cientos de miles de empleos remunerados que beneficiarán a la comunidad puertorriqueña. En la categoría de empleos, no hay duda de que, evaluando ambas plataformas, Hillary Clinton merece el voto puertorriqueño.
Situación Fiscal: La situación fiscal de la isla de Puerto Rico ha sido definitivamente tema de discusión en los medios nacionales. De una manera u otra los cinco millones de puertorriqueños en el continente están conectados con lo que sucede a diario en su isla. La más reciente reacción de Donald Trump ante la crisis en la isla fue: "No, no los rescataría". Siendo uno de los máximos líderes de su partido, Trump nunca abogó porque la mayoría republicana en el Congreso le diera paso al proyecto que permitiría a Puerto Rico reestructurar su deuda bajo el Capítulo 9 de quiebras federal como lo pueden hacer otros estados y territorios, como lo es el caso de las Islas Vírgenes. Hillary Clinton, por su parte, no solo abogó para que la isla pudiese reestructurar su deuda sino que ha presentado un plan que ayudará a Puerto Rico a regresar al camino de estabilidad y prosperidad. Para atender el gran reto de la crisis fiscal de Puerto Rico, no hay duda de que Hillary Clinton merece nuestra confianza y voto.
Salud: El tema de la salud es uno de suma importancia para la comunidad puertorriqueña tanto en la isla como en el continente. Donald Trump brilla por su ausencia en este asunto para los puertorriqueños: al día de hoy no ha presentado ni una sola propuesta para atender la crisis actual. Hillary Clinton, por su parte, ha demostrado no solo interés por este tema sino un compromiso genuino con ayudar a los puertorriqueños en esta crisis de salud. Hillary Clinton reconoce que Puerto Rico enfrenta dos crisis simultáneas, un sistema de salud con un financiamiento severamente insuficiente y una amenaza de salud pública por el virus del zika. Para atender dichos problemas en septiembre de 2015, la ex secretaria de Estado visitó la isla para participar en una mesa redonda sobre el tema de la salud en Puerto Rico. En dicha reunión y mesa redonda Clinton escuchó y dialogó con los principales líderes de todos los sectores de salud en la isla y destacó la inconsistencia y la disparidad que existe en el trato hacia los 3.4 millones de ciudadanos americanos en la isla; en específico, en Medicaid y Medicare. Meses después de dicha reunión Clinton envió a dos de sus principales ayudantes a la isla , Amanda Rentería, Directora Política Nacional y Ann O’Leary, principal asesora de política pública de la campaña Presidencial, para darle continuidad a la agenda por la igualdad en salud para los puertorriqueños. Como presidenta, Hillary instará al Congreso para que trate a Puerto Rico igual que los estados en cuanto a los servicios de salud mediante el aumento de la asignación de fondos de Medicaid pagados por el Gobierno federal y deteniendo los recortes a Medicare Advantage. Hillary también luchará por detener las intenciones de los republicanos y Donald Trump de retroceder la Ley de Cuidado de Salud Asequible (Affordable Care Act, ACA), la llamada Obamacare, y protegerá el progreso alcanzado. Como presidenta, Hillary defenderá Medicare y el Seguro Social, al igual que expandirá los beneficios para viudas y mujeres fuera de la fuerza laboral con el objetivo de facilitar un retiro digno a todas las familias. Desde atender la crisis del zika tanto en la isla como en los estados hasta reconocer el trato inconsistente y desigual que sufren los puertorriqueños en la isla. Definitivamente, en el tema de salud, ante la ausencia de planes de Donald Trump, Hillary Clinton merece nuestro voto.
Veteranos: el tema de los derechos a nuestros veteranos y a los de las fuerzas armadas definitivamente es uno de suma importancia para los puertorriqueños. Particularmente ya que desde 1917, más de 200,000 ciudadanos estadounidenses de Puerto Rico han servido en cada conflicto en las fuerzas armadas de EEUU desde la Guerra Civil y alrededor de 10,000 ciudadanos de Puerto Rico rinden servicio militar activo en todas las fuerzas armadas, a pesar de que los mismos no pueden votar por el Presidente mientras residen en la isla. Mientras que Donald Trump solo menciona generalidades en los medios de comunicación como “vamos a tener cuidado de nuestros veteranos y vamos a destruir a ISIS”, el plan que ha presentado, de acuerdo con varios expertos, implicaría la privatización de la Agencia de Servicios al Veterano poniendo en riesgo así la salud y los beneficios de cientos de miles de veteranos. Por su parte, Hillary Clinton no solo reconoce las grandes aportaciones de los puertorriqueños al servicio militar activo sino que entre sus planes se encuentran mejorar los servicios al veterano y darles trato igualitario a nuestros veteranos y de las fuerzas armadas. Además, propone dar trato igualitario en los beneficios de Tri-Care y que los mismos puedan votar por su Comandante en Jefe desde la isla de Puerto Rico, independientemente del estatus político que los puertorriqueños decidan. En cuanto al tema de los veteranos, no hay duda de que Hillary Clinton le lleva una ventaja a Donald Trump y sin duda merece nuestro voto.
Voto Presidencial: Mucho o poco se ha hablado sobre el tema del voto presidencial en la isla. La realidad todos la conocemos y es que hay 3.4 millones de ciudadanos estadounidenses que no gozan de ese derecho tan solo por vivir en la isla de Puerto Rico. Mientras que Donald Trump no se ha expresado ni ha presentado ninguna propuesta al presente para atender este problema, Hillary Clinton sí ha sido clara en cuál es su visión en cuanto a este tema. En múltiples ocasiones desde el 2008 al presente Clinton ha sido la única candidata/o que ha denunciado la inconsistencia e incoherencia de que los puertorriqueños sirvan en las fuerzas armadas, pero no puedan votar por el Presidente que los envía a la guerra; y la única que ha hecho un compromiso público de impulsar ese derecho de ser electa Presidenta impulsando el voto presidencial de puertorriqueños en la isla aún si el Congreso no actúa o no hay una resolución pronta en cuanto al tema del estatus político de Puerto Rico. En su discurso de victoria durante la primaria del 2008, en San Juan, Clinton dijo: “ Y espero que para el fin de mi segundo término, sin importar qué opción de estatus hayan escogido, ustedes también podrán votar por el Presidente de los Estados Unidos”. A diferencia de Donald Trump, Hillary Clinton cree que todos los ciudadanos estadounidenses, no importa dónde vivan, deberían tener el derecho de votar en las elecciones para escoger al Presidente de los Estados Unidos. En cuanto al tema del voto presidencial, para los puertorriqueños en la isla no hay duda que Hillary Clinton debe tener nuestro voto.
Estatus Político: Tanto para los puertorriqueños en la isla como en el continente el futuro de la isla es uno de los temas de mayor relevancia. Desde 1898 Puerto Rico es un territorio no incorporado de los Estados Unidos, adquirido de España mediante el tratado de Paris de 1898. Los puertorriqueños son ciudadanos estadounidenses desde 1917 por virtud de la Ley Jones . Mientras que Donald Trump no se ha expresado sobre este tema en lo absoluto ni propone ningún plan específico para resolver el centenario dilema del estatus de Puerto Rico, Hillary Clinton tiene muy claro cuál es la raíz del problema que sufren los puertorriqueños. Primero, Clinton reconoce que los puertorriqueños son orgullosos ciudadanos estadounidenses quienes han sacrificado mucho por el país y merecen tener una voz sobre las leyes que los gobiernan. Segundo, reconoce que bajo el estatus actual de la isla los puertorriqueños reciben un trato desigual, inconsistente e incoherente; y tercero, propone un proceso para resolver el estatus legal de Puerto Rico justo y consistente con la Constitución y las leyes de los Estados Unidos tal como una votación de sí o no a la estadidad. Para poner fin a este centenario dilema y resolver finalmente el problema del estatus de Puerto Rico, definitivamente Hillary Clinton es nuestra mejor opción.
A diferencia de Donald Trump, que no tiene ningún plan, la Secretaria Clinton no solo tiene más de 20 años de relación con la comunidad puertorriqueña sino que cuenta con un plan concreto para traer estabilidad, trato igualitario y prosperidad a los puertorriqueños tanto en la isla como en el continente.
El próximo 8 de noviembre, de cara a las próximas elecciones presidenciales, los sobre cinco millones de puertorriqueños en el continente tendrán el privilegio que los 3.4 millones en la isla no tienen, tendrán la oportunidad con su voto no solo de cambiar el futuro de la isla sino de definir el futuro de la nación eligiendo a la candidata que más conoce, más ha visitado, más ha ayudado y más se ha comprometido con Puerto Rico y la comunidad puertorriqueña en nuestra historia: Hillary R. Clinton.
Nota: La presente pieza fue seleccionada para publicación en nuestra sección de opinión como una contribución al debate público. La(s) visión(es) expresadas allí pertenecen exclusivamente a su(s) autor(es) y/o a la(s) organización(es) que representan. Este contenido no representa la visión de Univision Noticias o la de su línea editorial.