Descubren otras 12 lunas en Júpiter y una de ellas es “la rara”, según los científicos

Desde hace un año el Instituto Científico Carnegie, en Washington, buscaba objetos fuera de nuestro sistema solar y detectó con sus potentes telescopios una hilera de objetos merodeando cerca de Júpiter, pero no sabían si eran lunas o asteroides.
Ahora han confirmado el descubrimiento: se trata de otros 12 satélites que giran alrededor del enorme planeta gaseoso para un total de 79 lunas, la mayor cantidad de cualquier planeta de la Vía Láctea.
“No fue un descubrimiento repentino, sino que tardó un año determinar qué eran esos objetos”, dijo Scott Sheppard, quien dirigió el equipo del instituto que hizo el descubrimiento.
Las lunas pasaron mucho tiempo inadvertidas porque son sumamente pequeñas, con un diámetro de una o dos millas (o kilómetros), explicó Gareth Williams, del Centro de Planetas Menores del Instituto Astronómico, quien cree que Júpiter tiene incluso más de esas lunas diminutas que no han sido descubiertas.
“Simplemente no hemos observado esa área lo suficiente”, añadió Williams, quien contribuyó a confirmar las órbitas de las lunas.
"Júpiter es como una gran aspiradora porque es tan grande. Estos objetos empezaron a orbitar en torno a Júpiter en vez de caer a él. Entonces, creemos que son intermedios entre asteroides rocosos y cometas congelados. De modo que probablemente son mitad hielo y mitad roca", comentó Sheppard.
Una de ellas fue apodada por los científicos “la rara”, debido a su órbita inusual, gira en dirección contraria a la rotación del planeta y en contra de las demás lunas. Está en el anillo más distanciado de Júpiter,
“Es como si estuviera yendo por una calle en sentido contrario”, dijo Sheppard. “Es muy probable que choque con estos otros objetos. Probablemente ha chocado con ellos en el tiempo”.
La novia de Sheppard la rebautizó, y ese es ahora el nombre oficial, como Valetudo, la bisnieta del dios romano Júpiter.
La hipótesis es que Valetudo y las lunas parecidas surgieron poco después de la formación del planeta. Probablemente al inicio Júpiter actuó como un imán, atrayendo toda la materia a su alrededor. Alguna de esa materia se coaguló y quedó dando vueltas, convirtiéndose en sus lunas.
“Lo asombroso de estas lunas es que son residuos del material primario del planeta”, añadió el experto.
Para confirmar la existencia de estos satélites se usaron telescopios en Chile, Hawai y Arizona.
Galileo detectó en 1610 las cuatro lunas más grandes de Júpiter: Io, Europa, Ganímedes y Calisto. El total actual incluye ocho que no han sido vistas en año recientes. Entre los otros planetas que más lunas tienen están Saturno con 61, Urano con 27 y Neptuno con 14. Marte tiene dos, la Tierra tiene una, Mercurio y Venus no tienen ninguna.