Trump amenaza a Corea del Norte con "un fuego y una furia que el mundo jamás ha visto"
El presidente de Estados Unidos, Donald Trump, advirtió este martes a Corea del Norte que de escalar la amenaza de su armamento nuclear recibirá una respuesta contundente del país, luego de que se conociera un informe de inteligencia que desveló que el régimen de Pyongyang desarrolló una ojiva miniatura capaz de albergar carga nuclear dentro de sus misiles balísticos.
"Es mejor que Corea del Norte no vuelva a amenazar a Estados Unidos. Si lo hace, encontrará un fuego y una furia que el mundo jamás ha visto", sostuvo Trump en el Trump National Golf Club en Bedminster, Nueva Jersey.
Según reportó Reuters citando a la agencia estatal de noticias norcoreana KCNA, el régimen de Pyongyang respondió a la advertencia de Trump. Dijo que está "examinando cuidadosamente" un plan para atacar el territorio estadounidense de Guam con misiles de mediano a largo alcance y que podría implementarse "en cualquier momento".
Este martes, un reporte del diario The Washington Post cita un informe de inteligencia estadounidenses que asegura que Corea del Norte está lista para lanzar armas nucleares. Lo único que la frenaba era reducir el tamaño de la carga nuclear para introducirla en un misil, algo que ha sido resuelto según detalla el documento.
El análisis presentado este martes por la Agencia de Defensa e Inteligencia fue completado el 28 de julio y, según el Post, se conoció a la par de otra evaluación de inteligencia que demostró el aumento del número de bombas en el arsenal nuclear de Corea del Norte. Según cálculos de Estados Unidos, hasta 60 armas nucleares están bajo el control del líder norcoreano Kim Jong Un, aunque expertos independientes consideran que podrían ser menos.
La noticia sobre el avance de Corea del Norte en el desarrollo de su capacidad nuclear ocurre en momentos de gran preocupación para EEUU y Asia, pues expertos han confirmado el crecimiento de su arsenal a un ritmo más acelerado del que se pensaba podían alcanzar. También se conoce apenas días después de que Pyongyang lanzara un segundo misil balístico intercontinental en un mes, que voló 45 minutos, llegó a una altura de 2,300 millas antes de caer al agua y se teme que por su capacidad podría dar en un blanco tan lejos como Alaska.
Acrecenta además los temores de los organismos de inteligencia, tanto en EEUU como en Asia, de que el gobierno de Kim Jong Un pudiera desarrollar su arsenal de misiles que para el próximo año pudiera alcanzar ciudades de la Costa Oeste de EEUU.
El Consejo de Seguridad de la ONU ha impuesto nuevas sanciones a Corea del Norte, que podrían costarle mil millones de dólares anuales y afectan directamente su comercio con China, quien es su principal aliado comercial.
Pero Kim Jong Un advirtió que las medidas no detendrían su carrera armamentista y amenazó a Estados Unidos al asegurar que le haría "pagar mil veces el precio de su crimen".
Tras esas declaraciones, Estados Unidos respondió que su paciencia con las ambiciones nucleares del régimen norcoreano se había terminado.