Muere a los 88 años Quino, el mítico creador de la popular tira cómica Mafalda
El caricaturista argentino Joaquín Salvador Lavado, mejor conocido como 'Quino' y creador de la popular tira cómica Mafalda, murió este miércoles a los 88 años, confirmó su editor Daniel Divinsky a medios de comunicación.
"Se murió Quino. Toda la gente buena en el país y en el mundo lo llorará", dijo el editor, quien estuvo al frente de Ediciones La Flor.
Lavado saltó a la fama por su personaje de la pequeña Mafalda y justo ayer se cumplieron 56 años de su primera versión. Las viñetas de 'Quino' fueron publicadas en más de 35 idiomas.
Según el diario bonaerense Clarín, el artista gráfico sufrió un ACV la semana pasada.
"Se fue mi segundo papá. Gracias por todo, Quino", escribió en su cuenta de Twitter el humorista gráfico argentino Miguel Rep.
Y el caricaturista Liniers también lo despidió en Instagram con una foto de ambos y un "gracias, maestro".
Una afición temprana
La pasión de Quino por las historietas comenzó temprano. El diario argentino Clarín cuenta que desde los seis años ya mostraba afición por las historietas y que a los nueve años hizo un pacto con su madre: ella accedió a que él dibujara sobre la mesa de la cocina si él la cepillaba al terminar.
Tras la muerte de su mamá —cuando él tenía 12— y de su papá —tres años más tarde— el joven quedó al cuidado de un tío, que era pintor y dibujante publicitario. Él mismo fue quien despertó la pasión de Quino para dedicarse al dibujo. Una noche, cuando Joaquín Salvador Lavado era un niño de apenas tres años, sus padres lo dejaron bajo su cuidado y para entretenerlos les hizo dibujos a él y a sus hermanos.
A los 13 años ingresó a la Escuela de Bellas Artes en Mendoza, pero pronto la abandonó: le aburrían las clases teóricas, hacer ánforas y los yesos.
Cuando tenía 19 años viajó a Buenos Aires a probar suerte con las primeras historietas que había pintado justo en casa de su tío. Ni los diarios, ni las revistas, nadie se interesó en sus historias, así que se regresó a su natal Mendoza.
Fue el 9 de noviembre de 1954 cuando se publicó el primer dibujo de Quino en un ejemplar de la revista Esto. Él tenía 22 años y le pagaron 30 pesos. Esto lo definió así: "Revélase un nuevo dibujante argentino de penetrante ingenio en la línea lacónica", cuenta Clarín.
Y en 1957 publicó nuevas viñetas políticas en otra publicación, Rico Tipo, y tuvo sus primeros encuentros con Divito, uno de los dibujantes a los que más iró.
"La inolvidable Mafalda"
No fue sino hasta sus 30 años que nació Mafalda, la niña que odia la sopa. Fue concebida por encargo en 1963. En la agencia publicitaria Agens buscaban a alguien que dibujara la historieta de una línea de electrodomésticos que estaban por lanzar al mercado. El dibujante tenía que cumplir con dos condiciones, cuenta Clarín: el nombre de la protagonista de la tira cómica tenía que empezar con la sílaba MA, como la marca que promocionarían y debía representar a una familia argentina clase media.
Quino recordó entonces a una niña de nombre Mafalda que aparecía en una película y así nombró al personaje más famoso de Argentina. La campaña nunca se lanzó, pero el humor con tono de crítica social que caracterizó al personaje y a sus amigos Guille, Susanita, Miguelito, Manolito, Libertad y Felipe, se publicó desde 1964 hasta 1973. En total, fueron 1,928 tiras cómicas de Mafalda.
Después de que Mafalda dejó de publicarse, siguieron pasando cosas en torno al personaje: el franquismo usó la imagen del personaje de Guille para hacer propaganda, algo que disgustó a Quino; su esposa (Alicia Colombo, con quien estuvo casado desde 1960 y no tuvo hijos) y él debieron irse al exilio en Milán luego de que Quino se negara a que Mafalda fuera la imagen de campaña de un ministerio y un grupo armado rompiera la puerta del ascensor de su apartamento.
En sus caricaturas, el argentino siempre exaltó la libertad, ironizó sobre temas como la explotación laboral y las injusticias, y bromeó sobre el psicoanálisis. En enero de 2015, en un acto en Buenos Aires, utilizó al personaje de Mafalda para condenar el atentado contra el semanario satírico francés Charles Hebdo: "Mafalda hubiera sentido una terrible pena por el atentado", dijo entonces, ya en silla de ruedas y sosteniendo un cartel en el que se leía: "Yo soy Charlie".
Quino fue reconocido con distintas condecoraciones. Recibió el premio Príncipe de Asturias; el Legión de Honor de Francia; el Quevedo, que otorga la Universidad de Alcalá de Henares; la Feria Internacional del Libro de Guadalajara, en México, lo premió con La Catrina; fue reconocido por la ciudad de Buenos Aires y por su Mendoza natal.
Este miércoles, tras su muerte, el trabajo de Quino fue destacado por la Real Academia Española: "Nos ha dejado Quino, creador de la inolvidable Mafalda y uno de los dibujantes en español más internacionales. Sus agudas palabras viajaron a ambos lados del Atlántico gracias a sus viñetas y su peculiar sentido del humor".
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