El fantasma de Chávez vuelve a colarse en la campaña sucia contra López Obrador en México

CIUDAD DE MÉXICO.- La vieja estrategia de comparar al político izquierdista Andrés Manuel López Obrador con el fallecido Hugo Chávez ha vuelto, ahora con una misteriosa campaña de murales de apoyo en las calles de Venezuela.
En las ciudades venezolanas de Maracaibo, Barquisimeto, Valencia y Maracay aparecieron repentinamente anuncios a favor de López firmados supuestamente por el Partido Socialista Unido de Venezuela (PSUV), el cual fundó el expresidente Chávez.
Las fotografías de los murales se dieron a conocer sin crédito en portales venezolanos como La Patilla, que utilizó el titular: "¡Atención México no caigan en el desastre!: Aparecen en Venezuela grafitis de López Obrador firmados por el Psuv".
Luego la historia fue retomada por medios mexicanos, como el diario La Razón, que tituló: "Partido del chavismo pinta bardas en apoyo… de AMLO (Andrés Manuel López Obrador)".
El político izquierdista Andrés Manuel López Obrador, quien aspira a la presidencia de México por tercera ocasión, ha sido catalogado por sus contrincantes como el “Hugo Chávez mexicano”, a pesar que él ha negado haber tenido amistad o alguna relación con el expresidente de Venezuela.
En las campañas presidenciales mexicanas de 2006 y 2012 se usó la misma estrategia cuyo canal principal fueron anuncios televisivos para afectar a López Obrador, inclusive diciendo que el candidato de izquierda era un "peligro para México”, lo que le restó puntos de popularidad en las encuestas.
La misma estrategia también ha servido en elecciones intermedias, como la de 2017, donde a candidatos de Morena que -lidera López- se les acusó de haber recibido dinero del actual presidente de Venezuela, Nicolás Maduro.
Hasta el momento no se sabe quién hizo los murales a favor del político mexicano, pues Jacobo Torres, vocero del Partido Socialista Unido de Venezuela, dijo a la emisora RadioFórmula que esa institución no apoya a López.
Por su parte Obrador aseguró que se trata del regreso de las "campañas sucias" que intentan desprestigiarlo y están creadas por sus opositores políticos que según dijo pertenecen a "la mafia del poder", refiriéndose concretamente al oficialista Partido Revolucionario Institucional (PRI) y el Partido Acción Nacional (PAN), a los cuales se enfrentó en las urnas en el pasado.
"Es una estrategia de publicistas, por cierto, muy poco originales, bastante elementales, menores, mediocres. No es para menospreciarlos, pero la verdad todo esta ya no va a funcionarles (..) Están los de la mafia del poder muy desesperados, son los que están financiando esta campaña", dijo el precandidato del partido Morena a la presidencia de México.
"Yo no conozco al presidente de Venezuela, al señor (Nicolás) Maduro, no conocí al finado (Hugo) Chávez, no tengo ninguna relación con los políticos de Venezuela, ni tengo relación con políticos de otros países, he sido muy cuidadoso en eso", agregó.
El autor de la campaña contra López en 2006 es el consultor y estratega político Antonio Sola, quien estuvo dentro de la campaña de Felipe Calderón, que finalmente ganó la presidencia de México.
Sola afirmó en la entrevista con El Universal que la campaña contra López fue legítima, porque la ley electoral de entonces permitía “decir ciertas cosas como estas”, además dijo que Andrés Manuel “fue enemigo de sí mismo” pues no se supo defender, supuestamente porque estaba muy cercano a Hugo Chávez y sus “políticas públicas eran un peligro, por eso la gente creyó la publicidad”.
Tanto López Obrador como Hugo Chávez negaron desde 2006 conocerse. No obstante, existía cierta afinidad, a tal grado que el expresidente de Venezuela dijo que siempre quiso conocer a López Obrador. Y recientemente, la secretaria nacional de Morena, Yeidckol Polevnsky, apoyó en su redes sociales a Nicolás Maduro y simpatiza con la la República Bolivariana.
López Obrador en cambio ha rehuido al tema cada vez que se le pregunta cuál es su postura respecto al gobierno de Venezuela, país que atraviesa una crisis política, económica, de violencia y de violaciones a derechos humanos, además de ser considerada una dictadura, pues los poderes públicos están en manos del chavismo excepto la Asamblea Nacional, que por elección popular alcanzó la mayoría opositora.
“No lo voy a juzgar (a Maduro). Eso se lo dejo a los que nos están escuchando (...) No quiero que se metan después en las decisiones que solo corresponden a los mexicanos.”, dijo López Obrador en una entrevista con el periodista de Al Punto, Jorge Ramos.