El 'rey' de los zapatos viejos: el príncipe Philip usó los mismos durante más de 60 años
Todo mundo está hablando sobre la pasión del príncipe Philip por los Land Rover, pero pocos saben que al duque de Edimburgo también le gustaba mucho caminar. De hecho, los zapatos que usó en su boda con la reina Isabel II le gustaron tanto que los usó durante más de 60 años.
Philip vivió enamorado del mismo par de zapatos que usó en su boda de 1947, cuando desposó a la entonces princesa en Westminster Abbey, reportó The Daily Mail citando a uno de sus amigos.
Lord Karan Bilimoria, fundador de Cobra Beer, contó que el duque de Edimburgo le dijo en 2011 que estaba usando los mismos zapatos de su boda.
La isión ocurrió cuando ambos visitaron el Centro Zoroastra, en Londres, donde los visitantes se tienen que quitarse los zapatos para entrar. Al salir del centro, ambos estaban poniéndose los calzados de nuevo cuando Philip le reveló el origen de sus zapatos.
“Estábamos lado a lado, atándonos las agujetas cuando me dijo que esos eran los mismos zapatos que usó en su boda. Fue increíble”, dijo.
“ Quien sabe cuántas veces les habría cambiado la suela o reparado, pero eran los zapatos originales. Eran zapatos tradicionales de cuero negro. Él tuvo esos zapatos literalmente por más de 60 años”, prosiguió.
Lord Bilimoria y el duque de Edimburgo llegaron a ser amigos cercanos, relación que duró más de dos décadas, y no solo compartieron muchos momentos juntos sino también intercambiaron cartas sobre asuntos de interés común, agregó el tabloide.
“Él era alguien a quien siempre quería ver. Y cuando me despedía, ansiaba el momento de volver a verlo. Me enseñó mucho y siempre estuvo interesado en lo que yo hacía. Éra muy agudo, ocurrente y tenía un gran sentido del humor”, dijo Lord Bilimoria.
De cara a su funeral del sábado, todos están hablando sobre el Land Rover que Philip ayudó a diseñar y que llevará su ataúd de la puerta del Castillo de Windsor a la capilla de St. George, donde luego se le honrará en un funeral.
El duque de Edimburgo será recordado como el esposo de la reina que luchó por mantener la monarquía, así como por sus comentarios espontáneos que muchas veces lo metieron en problemas.
Lord Bilimoria, entre tanto, lo recuerda como una persona con los pies en la tierra, sencillo, que prefería una cerveza a un vino o champaña cara.
“Y eso fue debido a que era un sentimental. Era esa cualidad genuina que siempre tenía”, dijo.
La anécdota de los zapatos, dijo Lord Bilimoria, demuestra lo “maravilloso” que Philip fue como persona.
“Él fue el más extraordinario esposo, consorte, luchador, apoyo y roca de su majestad. De hecho, él fue la personificación de verdadero servicio de liderazgo”, puntualizó.
Philip, quien murió el viernes 9 de abril, a los 99 años, será sepultado el sábado en la capilla de St. George, que es parte del castillo de Windsor, luego de su funeral en el mismo lugar.
