Cuando Jennifer López va al baño, el resto de las mortales tiene que esperar afuera
Para que Jennifer López pudiera utilizar el baño con tranquilidad, algunas de las mujeres que aportaron, mínimo, 3,000 dólares para combatir la pobreza en la Ciudad de Nueva York, tuvieron que aguantar sus urgencias y hacer una larga fila que les garantizara su al servicio sanitario tan pronto 'la diva del Bronx' lo desalojara.
El reporte de lo ocurrido la noche del pasado lunes en el centro de convenciones Javitz, en Manhattan, fue publicado este jueves en Page Six, espacio que compartió las vivencias de algunas testigos. De acuerdo con sus relatos, Jennifer López estuvo en la gala de recaudación de fondos de la Fundación Robin Hood acompañando al presidente del evento, su novio Alex Rodríguez.
Aunque la actriz y cantante no formó parte del show, ya que las presentaciones musicales estuvieron a cargo de Miley Cyrus, Chris Martin y Jonny Buckland, de Coldplay, su presencia entre los 3,700 asistentes fue notable. Y mucho más cuando tuvo que ir al baño y cuatro de sus guardaespaldas se encargaron primero de que el cuarto quedara vacío para que ella y su pequeño séquito pudieran entrar.
Las asistentes a la gala que necesitaron ir al baño al mismo tiempo que Jennifer López se toparon con que la entrada estaba prohibida momentáneamente y fuertemente custodiada. De acuerdo con Page Six, algunas pensaron que la derrotada aspirante a la presidencia de Estados Unidos, Hillary Clinton, estaba utilizando el servicio y por tal razón había tanta seguridad.
Sin embargo, la incertidumbre no les acechó por mucho tiempo, pues cuando el comentarista deportivo y empresario Alex Rodríguez se acercó a los oficiales de seguridad y comenzó a enviar mensajes a través de su celular, sospecharon que podría tratarse de Jennifer López, lo que algunos minutos más tarde pudieron comprobar.
La situación, descrita como algo incómoda, no es ajena entre quienes asisten a estos eventos de recaudación de fondos como el del lunes, donde además de las celebridades ya mencionadas, también asistieron Michael Douglas y Catherine Zeta Jones así como figuras de la política, como el gobernador de Nueva York, Andrew Cuomo y el exgobernador de Florida, Jeb Bush.
Lo mejor de la gala fue la cantidad de dinero recaudado: 54.5 millones de dólares.
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